Este triángulo es un modo de explicar que hay tres elementos que se ven afectados a la hora de querer hacer algo: lo que queremos hacer, en cuanto tiempo queremos hacerlo y cuanto queremos que nos cueste. Como resultado de este triángulo tendremos un área que indicará la "calidad" con la que vamos a hacerlo.
En nuestro caso, las cosas son similares aunque con alguna diferencia:
- Lo que queremos hacer: No hace falta explicar mucho este punto. Viajar, disfrutar de la vida, gozar de nuestro ocio son metas que queremos alcanzar, cubriendo la alimentación, ropa, vivienda, servicios, etc.
- En cuanto tiempo queremos hacerlo: Aquí comenzamos ya a cambiar algo respecto de los proyectos, ya que no hay una fecha única. No es lo mismo planear unas vacaciones para este año, que para el año que viene. De cualquier modo, es necesario que sepamos cuando queremos las cosas.
Tenemos que tener en cuenta que hay por otro lado restricciones de tiempo cuando hablamos de cosas como impuestos, seguros, mantenimientos, que debemos considerar. Además de que hemos de tener en cuenta que nuestro "proyecto" no va a acabar nunca, ya que según vayamos alcanzando objetivos nos surgirán otros. - Cuanto nos queremos gastar: Aquí la respuesta es simple: nos vamos a gastar todo lo que tenemos. Es la proporción de lo que tenemos y que asignemos a cada una de las cosas que queremos hacer lo que va a cambiar y por lo tanto lo que tendremos que tener en cuenta.
Bueno, hay modos de "sufrir menos", pero es difícil el salirse de él. La razón es que cuando cambias una de las variables (tienes más fondos, dispones de más tiempo, o quieres menos cosas) lo que estás haciendo es cambiar el triángulo por otro nuevo que se define con tus nueva situación. ¡Terrible!
¿Cómo lo hacemos? Lo primero es llegar a tener claro lo que queremos hacer, luego tener claro cuanto nos queremos (o podemos) gastar, y en función de ello empezar a poner las cosas para que nos vayan cuadrando en cuanto tiempo queremos hacerlo. Pero eso lo haremos otro día.
Sed felices.